La Romana todavía reina en la sureña ciudad portuaria de La Romana, un lugar dedicado a cortar, moler y exportar azúcar desde 1917. El enorme ingenio azucarero, aunque dañado por el huracán Georges de 1998, todavía domina la ciudad, y es probable que vea trenes llenos de cañas recorriendo el campo circundante. El turismo, en lugar del azúcar, es ahora el principal elemento vital de la ciudad, y su orgullo y alegría es el cercano resort Casa de Campo. Este parque tropical de playa, instalaciones deportivas y exquisitos jardines ofrece la opción más sofisticada de actividades.